Hidratación, hidratación, hidratación: ¡la importancia del agua!
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El agua es esencial para la vida. Nuestros cuerpos contienen alrededor de un 60 % de agua, así que si no mantenemos su nivel, corremos el riesgo de deshidratarnos y enfermarnos. Literalmente, no puede sobrevivir sin agua.
Su cuerpo pierde agua con regularidad: la excreta como desperdicio, pero también a través de la respiración, el sudor y la digestión. Es por eso que es tan importante mantenerse hidratado bebiendo abundante agua cada día.
Los muchos beneficios de tomar agua
El beneficio más evidente y directo de tomar agua es que no sentirá sed, algo que cualquiera que haya estado desesperado por beber en un caluroso día de verano sabrá que es una sensación muy desagradable. Sin embargo, hay muchos otros beneficios de beber agua, ya que el agua afecta nuestra apariencia, así como nuestra salud física y nuestro bienestar mental.
El agua ayuda con el control de peso
El agua no contiene calorías y puede ayudarlo a sentirse satisfecho, pero sus beneficios van más allá. Se ha demostrado que, cuando se consume antes de las comidas, el agua puede realmente ayudar a eliminar el apetito, así como ayudar a quemar más de las calorías que consume.1 El otro aspecto genial acerca de beber agua es que puede aumentar las calorías que uno quema sin tener que hacer nada más.1 Los estudios han demostrado que beber alrededor de medio litro de agua puede dar como resultado que se quemen 23 calorías adicionales, lo que podría no parecer mucho, pero equivale a alrededor de 17 000 calorías adicionales al año, o más de 2 kg (4,4 libras) de grasa.
El agua ayuda a la digestión
El agua ayuda a descomponer los alimentos, los mantiene en movimiento sin problemas a través de nuestros conductos digestivos y ayuda a que nuestro cuerpo absorba todos los minerales importantes y otros nutrientes que necesitamos para mantenernos saludables. A medida que el agua se mueve por el estómago y los intestinos, evita que la fibra, “se pegue”, suavizando las heces y reduciendo el estreñimiento, lo que nos ayuda a eliminar los desechos. Sin embargo, el momento en que bebe agua también es importante: beber antes de comer es mejor, porque si bebe demasiado pronto después de comer podría diluir los jugos gástricos que lo ayudarán a absorber nutrientes.
El agua mantiene nuestras articulaciones saludables
La importancia del agua también se extiende a nuestras articulaciones. El agua ayuda a proteger los tejidos, las articulaciones y la médula espinal manteniendo los niveles correctos de hidratación alrededor de las áreas sensibles que son propensas a secarse, como la nariz y los ojos. También protege la sangre, los huesos y el cerebro, y actúa como un cojín en nuestras articulaciones para reducir los impactos y limitar nuestras posibilidades de lesionarnos.2
El agua mantiene la piel en excelentes condiciones
Como han demostrado numerosos estudios, el agua es magnífica para la piel.3 Cuando se trata de la tez, no hay palabras suficientes para destacar la importancia de la hidratación desde el interior. Las erupciones, las imperfecciones y la inflamación son resultado de toxinas y la mejor manera de deshacerse de ellas es hacerlas aflorar. ¿Y cómo se logra? Con agua. Además, el agua también ayuda a transportar oxígeno y nutrientes a las células de la piel para reducir el envejecimiento prematuro, por lo que incluso si considera que está totalmente libre de toxinas, de todos modos debe consumir al menos los ocho vasos de agua recomendados cada día.
¿Cuánta agua debemos beber?
Los beneficios de beber agua son claros, razón por la cual se han creado organizaciones de beneficencia como Lifeplus Foundation para ayudar a resolver la escasez de agua en los países en vías de desarrollo en todo el mundo. Por lo general, se dice que todos deberíamos consumir unos 8 vasos de agua al día, pero aunque esta es una buena pauta, la verdad es que nadie sabe realmente de dónde proviene esta cifra. Además, algunas personas pueden necesitar mucho más o menos agua que otras. Si, por ejemplo, tuviera que participar en un ejercicio intenso, sudaría más, además de que perdería más agua a través de la respiración, en cuyo caso necesitaría beber más que alguien que está sentado delante de una computadora. De igual modo, aquellos que viven en climas cálidos van a necesitar beber más agua que los que viven en climas más fríos.
Lo importante es considerar sus necesidades personales. Esté atento a los signos de deshidratación, como dolores de cabeza y agotamiento, o dificultad para concentrarse. Recuerde también que el agua puede tener diferentes formas, por lo tanto, si no le gustas el agua simple, intente agregar un toque de concentrado con sabor a frutas. El té, el café y el agua en los alimentos, en especial en las frutas y las verduras, también cuenta. Por regla general, debe beber agua siempre que tenga sed y beber lo suficiente como para saciarla.